“Animo Pueblo Mío”
Por: Joyce Álvarez León.
IPO “La Providencia”
Cuba
Hace muy poco supe que este era el lema del anterior Pontífice Juan Pablo II, “Ánimo Pueblo Mío”, todavía puedo recordar con amarga memoria como un vehículo de una iglesia (debe haber sido Católica Por lo anterior) un microbús como le decimos en Cuba con espacio para 10 0 15 viajeros completamente vacío nos dejo esperando que alguien de buena fe nos adelantara en nuestra dificultad por viajar a través de las carreteras en nuestro País, al fondo del vehículo el lema, “Animo Pueblo Mío”.
Todos sabemos de las aventuras a la hora de viajar el cubano, los camiones desprovistos de seguridad, sin condiciones para transportar (incluso niños u otros en cualquier estado) cruzan el país de un extremo a otro lleno de pasajeros con un sueño, con una esperanza. Sabemos de los esfuerzos que se hacen a nivel de gobierno para solucionar esta lacra productora de tantas desgracias y accidentes.
¡Aun no es suficiente!
Sabemos quien tiene que darle solución a esta seria dificultad.
Ahora bien, ¿Es razonable que un vehiculo con capacidad, con condiciones para adelantar a un grupo y el mal sea menor, circule vacío mientras los conductores ven con apatía la enorme masa de necesitados?
Con muy poca caridad obraba su chofer al vernos allí a una hora nada buena y con deseo de llegar a nuestros hogares para encerrarnos en nuestras ya grandes dificultades
¡Hubiera podido llevarnos! Pero iba absorto tal vez en sus problemas.
Estas escenas a diario recorren la Isla, A veces pienso, ¿Si Jesús viniera? ¿Que fuera de estos autos? ¿Qué de sus Choferes?
¿Pueden ser tan insensibles a las dificultades de los demás y pasar ajenos a la situación?
¿Podemos callar? ¡O decir como alguien dijo ¡“Y eso que es una Iglesia…” Este es mi llamado a la reflexión.
¡Por favor!, ¡En la breve estancia de Jesús en la tierra anduvo sanando, haciendo el bien!, ¡Sus máximas resuenan como cuchillos contra una conciencia dura!
Es mi llamado a no ser parte del problema sino de la solución.
Todos caminamos este camino fatigoso, a algunos se nos hace ya demasiado largo, los menos favorecidos vemos como una juventud se nos ha ido, otros miran desde el Coliseo como las almas más cansadas entregan su voto por el futuro.
¿Dónde estas ud. en las arenas o en las gradas?
