Jesucristo Nuestro Pentecostés
Por: Ismael "Pete" Hilerio
INTRODUCCIÓN:
La materia presente es una crítica que el Señor F. van Deursen, hace con relación al libro bajo el titulo “Bautismo del Espíritu y glosolalia” y que tiene por subtítulo: ‘El punto de vista calvinista contrastado con las Sagradas Escrituras’; cuyo autor es el Dr. J.A. Schep. La historia emprende para el año 1970 cuando el Pastor Deursen, recibió un libro de parte de una persona amiga para que lo disfrutara ó diera un vistazo al contenido del mismo. A pesar de las labores que el Pastor Deursen enfrentaba diariamente en aquel entonces se nos relata que para el año 1971 tomo el libro para explorar la terminología cuando a sí reaccionó al comprendido de aquel texto llevándole a dirigirse al Dr. J.A. Schep, con una carta personal para a sí cuestionar la ideología de su contenido. Sin embargo, esa carta vino hacer dominio público en muchos círculos de los Países Bajos, bajo el titulo "El Espíritu de Pentecostés”.
LA INICIACIÓN DEL LIBRO:
Es interesante en como el Pastor Deursen, comienza su texto en base del argumento hacía al Dr. Schep. Primero establece el fundamento para construir su carta que fue dirigida al Dr. Schep en el 15 de enero de 1971. El libro esta dividido en dos parte. La primera-(1), empieza con la importancia de la Palabra y que pongamos atención a ella y, el segundo, que el Espíritu que se dirige a ellas es el mismo Cristo. El Pastor Deursen, basa su iniciación a tomar como punto de partida las ‘siete cartas’ a las iglesias de Asia Menor-(2). La Segunda parte, es la crítica al Dr. Schep, en relación a lo establecido en la primera parte como introducción.
LA DESVIACIÓN DE ESTOS MOVIMIENTOS:
Los movimientos carismáticos y pentecostales han sido el producto de la teología wesleyana dando así énfasis a la santificación como una “segunda obra” del Espíritu Santo posterior a la conversión y, asociada con una intensa experiencia religiosa comúnmente llamada el “bautismo del Espíritu Santo”. En otras palabras, es entonces, que el convertido esta acto a vivir bajo una vida consagrada o sea en la santidad cuando recibe tal bautismo. Aunque, se comprende que el pentecostalismo surgió en las primeras décadas del siglo 20 como un movimiento nacido de los círculos de santidad de América del Norte; no obstante, ésta corriente, ha sido como influencia de la teología wesleyana. Sin embargo, la reacción a la relajación en las iglesias tradicionales wesleyanas, pusieron énfasis sobre la santificación donde surgió un movimiento de santidad con una nueva fuerza formando más de una veintena de nueva denominaciones, en la década 1895-1905, consagradas a los principios de la santidad-(3).
Y como resultado, a estos, dentro de ciertos círculos entre estas comunicaciones de santidad, y una aguda preocupación y cultivo de una experiencia religiosa, brotó muy pronto una doctrina conocida como la “tercera bendición”, posterior a la santificación y concebida como “el bautismo con el Espíritu Santo y fuego”, a sí queriendo dar una evidencia segura ante el público que el convertido que haya recibido la “tercera bendición” entraba en lo que se conoce ‘la plenitud en el Espíritu’. Sin embargo, posteriormente los pentecostales enseñaron que ningún cristiano podía sentirse satisfecho, o sea (en la plenitud) hasta que hubiera hablado en lenguas, como prueba de haber recibido el Espíritu Santo-(4). Es decir, la terminología que nuestros hermanos hace referencia es “la segunda bendición—santificación) puede limpiar y purificar al creyente, pero solamente la “tercera bendición” puede dar poder para el servicio.
CRISTO NUESTRA PLENITUD:
¿Acaso ésta enseñanza pone la obra de Dios y el sacrificio de Su Hijo Jesucristo en el banquillo de los acusados? Adónde se le acusa en no ser suficiente en cuestión a la plenitud en la vida del creyente-(5). ¿A caso Jesucristo no es la plenitud en todo? El apóstol Pablo, lo certifica en el siguiente texto: “por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, y por medio de Él reconciliar todas las cosas consigo, habiendo hecho la paz por medio de la sangre de su cruz, por medio de Él, repito, ya sean las que están en la tierra o las que están en los cielos—Colosenses 1:19-20.
La intención del apóstol en el texto mencionado era para expresar a los remanentes en Cristo que la idea de Toda la Plenitud— (pän to plëroma-(6)) es la misma idea que en el 2:9, pän to plëröma tës theotëtos-(7) que significa literalmente (toda la plenitud de la Deidad); y revelando a sí, la totalidad de los poderes y atributos divinos en la majestuosidad de la persona de Cristo como la plenitud que llena todo ser.
Esto da la indicación aun antiguo término derivado del plëroö(8), llenar hasta arriba, empleando en varios sentidos, como Marcos 8:20--plëromata las canastas donde el verbo se atribuye a plëroma. Gálatas 4:10 de tiempo, etc. Los gnósticos distribuían los poderes divinos entre varios períodos. Sin embargo, el apóstol los reúne todos en Cristo, dando una plena y llana declaración de la Deidad de Cristo. Es decir, todos los atributos divinos tienen su hogar en Cristo. Esto nos lleva a la epístola Paulina cuando se asombro con los Gálatas: “Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo—Gálatas 1:6-7.
La otra indicación que nos lleva se encuentra en el texto que dice: Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad—Colosenses 2:9-10.
Otra vez, damos referencia: hoti en autôi katoikei pân to plêrôma tês theotêtos sômatikôs. Que traducido es: Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad. Es decir, la plenitud de la Deidad estaba en Cristo antes de la Encarnación. El hincapié que quiero llevar es en el versículo diez: (este peplêrômenoi) que traducido es “vosotros estáis completos en él”-(9). La indicación apunta que Cristo es nuestra plenitud, de la que todos nosotros participamos (Jn 1:16; Ef. 1:23), y nuestra meta es llegar a tener la plenitud de Dios en la persona de Cristo (Ef. 3:19). Es decir, en Cristo nosotros encontramos la satisfacción de todo anhelo espiritual para crecer en gracia; quien es La Cabeza (hê kaphalê). Afirmando que no puede haber otro puesto para Cristo. Él es primero (1:8) en tiempo y en dignidad. Todo gobierno y autoridad viene tras Cristo, trátese de lo que se trate, ángeles, eones, reyes, y lo que sea; esto incluye la plenitud de todo cristiano. Es decir, Cristo/Espíritu es nuestro Pentecostés.
UNA IDEOLOGÍA AFUERA DEL FUNDAMENTO ESTABLECIDO POR JESÚS, Y SUS APÓSTOLES ES UNA REPUGNANCIA HACÍA EL DIOS TRINO.
Es importante señalar que dentro de estos movimientos se describen dos clases de fe. Una esta puesta en Cristo para salvación mientras que la otra esta integrada en el Espíritu Santo. Esto se debe como he dicho anterior que la fe primera no es suficiente para lo sigue después. Es decir, que la segunda fe completa la interior, para recibir poder, consagración, y perseverancia. Esto implica que el concepto de su fe es uno que lía a luchar, hacer sacrificio, y pagar el precio. La pregunta sería, ¿en qué categoría ponen el precio que Cristo pagó en el madero? La contestación que ellos sé basan es: “poderosa”, pero no obstante, misericordioso”. El problema de esta categoría es que ellos esconden la DEPENDENCIA que Dios tiene hacía sus criaturas bajo la palabra misericordia. Cuando oímos algunos de nuestros hermanos decir que Dios es misericordioso lo que ellos realmente están diciendo es: “Dios esta bajo mí autonomía”. El problema de está noción es que Dios, es quien responde al hombre, porque (el hombre) ha llenado los requerimientos o cumplido con las situaciones bajo su determinación-(10).
No obstante, dentro de estos movimientos se afirman que la salvación es por la fe, pero cuando ellos proclaman que la santificación es por las obras, agregan obras a la salvación misma. Para optimizar mí argumento al presente concepto del pentecostalismo y otros movimientos en cuestión a la fe que ellos proclaman haré un contraste con la fe neo-testamentaria:
1. La fe pentecostal es complicada, la fe del Nuevo Testamento es sencilla. 2. La fe pentecostal paga un precio, la fe del Nuevo Testamento parece decir “NO TENGO NADA”. 3. La fe pentecostal requiere mucho esfuerzo humano, la fe del Nuevo Testamento deja todo esfuerzo humano cediendo lugar a la obra de Cristo. 4. La fe pentecostal provoca ufanarse y jactarse de los logros, la fe del Nuevo Testamento confiesa fallas y desobediencias. 5. La fe pentecostal requiere casi la perfección, la fe del Nuevo Testamento reconoce sus límites y pide humildad.
Es evidente, que el concepto de la fe de ellos, es el mayor problema doctrinal en la cual están sujetados; porque hace depender de sus obras sea en, la salvación, la santificación, y la capacitación para el ministerio. La pregunta entonces, sería ¿por qué somos REFORMADOS? La contestación es simple, “por que ésta posición del pentecostalismo y otros movimientos difiere de las enseñanzas del Nuevo Testamento que ellos dan énfasis a los cincos puntos esenciales de las Sagradas Escrituras.
El apóstol Pablo, nos exhorta diciendo: “Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo—1Cor 3:11.” Hay dos pensamientos que presumo a presentar. Primero, (themelion allon) que traducido es “OTRO FUNDAMENTO”. Aquí el género del adjetivo es masculino como lo indica ‘allon’-(11). Si fuera neutro entonces, sería ‘allo’; pero como el apóstol tiene en mente a Cristo pone su atención en lo masculino. Sin embargo, aquí no se trata de un evangelio diferente como lo indica Gálatas 1:6; 2ª Co. 11:4) ni tampoco (‘allo’--no es otro, Gál. 1:7). Sino, que el énfasis en 2ª Co. 11:4 ésta en (allon Iêsoun). OTRO JESUCRISTO.
En otras palabras, no hay lugar en la plataforma con Jesús para ningún salvador o poder, sea: Buda, Mahoma, Smith, Dowie, Eddy, AVILA, Hinn y otros que prosiguen una segunda y tercera bendición. Jesucristo es el fundamento, y es una imprudencia gratuita que otro ó algo asuma el papel de fundamento; que el que está puesto, el cual es (SOLUS CHRISTUS).
Esto nos lleva al segundo argumento.
(para ton keimenon, hos estin Iêsous Christos) que traducido es: “que el que está puesto, el cual es Jesucristo”. Es decir, al opuesto keimenon(12). Aquí el apóstol Pablo, nuevamente recalca que nadie, incluso, en interés del pretendido ‘nuevo pensamiento’, inicie poner junto a Jesús otro fundamento para el cristianismo histórico como lo es {la segunda o tercera bendición}.
No obstante, aunque, el presente texto se refiere la originalidad y los problemas continuos de los cristianos en Corintios con relación a las divisiones que existían dando así referencia al mismo capítulo en los siguientes versículos.
“Así que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo. 2 Os di a beber leche, no alimento sólido, porque todavía no podíais recibirlo. En verdad, ni aun ahora podéis, 3 porque todavía sois carnales. Pues habiendo celos y contiendas entre vosotros, ¿no sois carnales y andáis como hombres? 4 Porque cuando uno dice: Yo soy de Pablo, y otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois simplemente hombres? 5 ¿Qué es, pues, Apolos? Y ¿qué es Pablo? Servidores mediante los cuales vosotros habéis creído, según el Señor dio oportunidad a cada uno. 6 Yo planté, Apolos regó, pero Dios ha dado el crecimiento. 7 Así que ni el que planta ni el que riega es algo, sino Dios que da el crecimiento. 8 Ahora bien, el que planta y el que riega son una misma cosa, pero cada uno recibirá su propia recompensa conforme a su propia labor. 9 Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios” 1 Cor. 3:1-9-(13).
Sin embargo, lo encuentro útil para esgrimirlo como referencia en cuestión a historiar a Jesucristo como el fundamento. Lo que quiero decir, es, Jesucristo siendo el fundamento también es nuestra ‘REVELACIÓN Y PODER’ cumplido en las Escrituras. Es de redundarme con la expresión ¡CRISTO ES EL ESPÍRITU DE PENTECOSTÉS QUE A LLEGADO A NOSOTROS!
Con todo, dentro de estos movimiento escuche a un pastor pentecostal dirigiéndose en la radioemisora con la siguiente expresión: “Si nos estancamos, Dios, se estanca” ¿Qué quiere decir este pastor con esto? Para cultivar en la búsqueda a nuestra respuesta tenemos que considera la fe en el movimiento de la fe. Es decir, no es fe sino obra y si es obra pues, es una paradoja. Por ejemplo, lo que sucede con éste pastor es que el define la fe como una fuerza declarando que ‘Dios está obligado indirectamente’ a someterse a esa potencia, ya que ella es la que hace que trabajen las leyes del mundo espiritual; poniéndose la atención que la fuerza es activada por Dios a través de lo que se dice, esto indica que lo que se establece en una ‘frase’ es lo que activa la fe, sea lo positivo de la fuerza o lo negativo de ella. Está implicación que el pastor ha formulado a través de la emisora dice que Dios está obligado a cumplir tan sólo porque alguien a sí “se lo ordena por medio de la fuerza en la frase particular usando así la misma Palabra de Dios para enconarlo”
La fe de estos movimientos tanto pentecostales, carismáticos y wesleyanas, Dios salva porque el creyente tiene fe de que Dios lo salva. Dios sana, porque el creyente declara que está sano por la fuerza de la fe. Éstas son las causas para los términos “palabra de fe”. Inclusive, esta ideología humanística esta como el león rugiente buscando a quién devorar.
En resumidas cuentas, la declaración del pastor, es está: ¡Que el Espíritu Santo que es Dios se somete a ellos por medio de la fuerza que ellos plantan en la frase! Esto es al contrario, de los verdaderos creyentes que se someten a la voluntad de Dios y al control del Espíritu Santo.
EL TIEMPO DE LOS APÓSTOLES UNA ÉPOCA ÚNICA
La pregunta es ¿Enseñan las Sagradas Escrituras un bautismo especial con el Espíritu Santo, y están destinados también a la iglesia de hoy los dones particulares del Espíritu, referidos en 1 Co., capítulos 12 a 14?
De acuerdo con el movimiento pentecostal y otros movimientos como la bendición de Toronto-(14) que va acompañada de fenómenos extraordinarios como gritos, risas histéricas, caídas hacia atrás, brincos y bailes, prolongados temblores, etc. Además de todo esto, están también los gruñidos y cacareos producidos por la Bendición de Toronto, afirman que ¡Sí!
Veamos lo que enseña el Nuevo Testamento en cuestión al Bautismo.
En el NT se refiere el bautismo:
1. como un suceso profético. Las cinco referencias hablan de un evento todavía futuro. Ref. (Mt. 3:11; Mr. 1:7-8; Lc. 3:16; Jn. 1:33; Hch 1:5) 2. como un acontecimiento histórico en Hch. 2: 1-7 y 10: 44-48; (explicado en 11:16 y relacionado con 2:1-7. 3. como un asunto didáctico. Cinco veces es referido por el apóstol Pablo para enseñar que los ‘cristianos ya estamos bautizados por el Espíritu Santo’, no sólo los que tienen un comportamiento más santo o maduro. De hecho, a los corintios se le explicó con mucho énfasis. Ref. Ro. 6:3; 1 Co. 12:13; Gá. 3:27; Ef. 4: 5; Col. 2:12.
El bautismo del Espíritu es una obra instantánea. En otras palabras, el ser regenerado en la gracia salvadora el bautismo es permanente y no se repite constantemente en los creyentes. Notamos que 1 Co. 12: 13, se usa la voz pasiva del verbo, “fuimos...bautizados”, esto indica, quien es bautizado no tiene que hacer nada para que la acción ejecute. Por lo tanto, es una obra que no se deriva de la experiencia. Es decir, ni se busca, ni se merece-(15).
Veamos, acerca del Espíritu Santo en el Antiguo Testamento y en Nuevo Testamento en relación con el hombre.
1. El Espíritu Santo habitaba en algunas personas en el A.T. (Génesis 41:38; Número 27:18; Daniel 4:8) pero no era necesariamente una habitación permanente. El Señor Jesucristo testificó que habría un cambio dramático entre el Antiguo y Nuevo Testamentos concerniente al Espíritu Santo—Ref. Juan 7:37-39. 2. El Espíritu Santo iba a tener una función diferente. Ese mismo Espíritu Santo iba a venir y permanecer con la iglesia después de que Cristo fuese glorificado. 3. El Espíritu Santo es un residente de la Iglesia y del creyente—Ref. Juan 14: 16-17. Es decir, hoy en día, todo creyente tiene el Espíritu Santo dentro de, al lado de, y con él para siempre.
Una evidencia directa del bautismo del Espíritu es la unidad con que la iglesia goza. Por ejemplo, el apóstol Pablo, enfatiza en 1 Corintios 12 y en Romanos 12, que el contexto se basa en la unidad, y no en los dones Espirituales. Sin embargo, si algunos de nuestros hermanos enfatizan los dones, tenemos que subrayar que los dones fueron repartidos en diversidad precisamente para “SER UNO”. Veamos, Efesios 4:5, “un Señor, una fe, un bautismo”, aquí el contexto es el fundamento de la iglesia. Es decir, "la fe" y "el bautismo" mostrando (el sello sacramental de la fe) son conectados. Ref. “...habiendo sido sepultados con Él en el bautismo, en el cual también habéis resucitado con Él por la fe en la acción del poder de Dios, que le resucitó de entre los muertos” Col. 2:12.
Estas son algunas indicaciones que muestran que el bautismo del Espíritu Santo identifica al creyente con Cristo en todos los aspectos, pero sobre todo, debido al simbolismo detrás del bautismo, descrito en Romanos 6, identifica al creyente con la muerte de Cristo.
Como podemos ver el Espíritu Santo es nuestro consolador si hemos recibido al Señor Jesucristo como nuestro Salvador personal. Si no tenemos el Espíritu Santo no somos de El—Romanos 8:9., y por lo tanto el Espíritu Santo se convierte en nuestro “Acusador Público” “Oficial de Justicia”-(16).
En la Biblia, el apostolado se refiere de manera muy particular a “LOS DOCES”, incluyendo a Matías. La Biblia también aplica este término a Bernabé y a Pablo—Hch 13: 2-3-(17). Ellos tenían conocimiento y poderes sobrenaturales para autenticar su testimonio de la resurrección de Jesús—Hch 5:12; 2 Cor. 12:12 Cf. Hch 1:22. Los Apóstoles del NT son considerados personajes únicos, porque pusieron el fundamento de la iglesia-(18). Sin embargo, la tercera ola del movimiento pentecostal quiere aplicarse de todos estos requisitos, condiciones y propósitos, y decir que sus nuevos apóstoles los cumplen y requieren poniéndose constantemente en una misma línea a los Apóstoles.
Antes de llegar a mí conclusión no puedo pasar por alto Hebreos 1:1-2 donde enfatiza que algunos dones particulares han cesados.
“Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, 2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;”
Este preámbulo tiene por objeto en confiar en la doctrina enseñada por Cristo; donde nos indica que no sólo debemos recibirla con reverencia sino que únicamente ella debe ser nuestra satisfacción. Los puntos centrales de estos pensamientos que el apóstol se dirige en está epístola a los hebreos es para equipar a la iglesia en cuestión que el Hijo de Dios es colocado en posición de los profetas. Es decir, los dones proféticos ha concluidos en la persona de Cristo. Segundo, las diversas y múltiples formas de hablar que Dios adoptó en relación con los padres-(19), hasta llegar a la última revelación que nos fue dada por Cristo. Es decir, Cristo es presentado aquí como la Palabra final de Dios.
CONCLUSIÓN
¿Cómo podemos evitar con este evidencialismo que ellos asumen?
Recordemos, pues, que la Biblia fue escrita históricamente para el beneficio de los creyentes. Esto implica que hubo un promedio de cuarenta autores diferentes-(20), en tiempos diversos y por un espacio de 16 siglos adónde hubo revelación de inteligencia sobrenatural, originando el comienzo de un sólo fundamento que es la iglesia universal apostólica, y las ampliaciones de persecuciones extravagantes por el desarrollo de su estructura y de su contenido; y esto, para el beneficio de Su remanente a través de la persona histórica de Cristo.
No podemos a través de nuestros estudios violar su comprendido en generalizarla para nuestra época. Es decir, no vivimos en los tiempos cuando la Biblia estaba formándose, si borramos su carácter histórico estamos poniéndonos en la misma altura con aquellos hombres que fueron llamados para hacer una tarea particular y, no estamos respetando sus posiciones apostólicos y como nuestros padres.
Damos gracias a Dios por esto hombres y otros que dieron sus vidas para que nosotros gocemos de este fundamento que revela la obra salvadora de Cristo.
APLICACIÓN:
Pregunta para reflexionar.
¿Por qué en algunos movimientos aceptan que el tiempo de los apóstoles han cesados mientras que las manifestaciones apostólicas no? ¿cuál es la confusión de ellos?
Entretanto, hay que reconocer que hay personas, creyentes o no, que parecen necesitar ser estimulados por medio de experiencias como el hablar en lenguas, tener visiones, o “liberarse”. Estas experiencias les dan una “emoción” donde lamentablemente no podemos decir “convicción” de sentirse seguras, realizadas y satisfechas y útiles. Estos hermanos merecen de nuestro amor y consideración. Es decir, tener una postura prudente es respetar sus emociones. “No tenemos el derecho a quitarles esas experiencias, pero si tenemos el derecho a evitar que esas experiencias sean CONSIDERADAS COMO BÍBLICAS y por lo tanto autoritativas y necesarias para todo el creyente”.
Al contrario, la base fundamental de nuestra conducta y decisiones es la Biblia como regla autoritativa para nuestra conducta y crecimiento hasta llegar a la plenitud de Cristo; y no las experiencias extraordinarias. Sin embargo, las experiencias en obedecer y aplicar la Biblia son una realidad extraordinaria a la que debemos dar importancia. Estas van dando oportunidad a que el Espíritu Santo vaya moldeando nuestra vida. Sí, observamos la condicionalidad de estas experiencias: se trata de OBEDECER Y APLICAR LA BIBLIA.
Un ejemplo, lo vemos en la iglesia del Nuevo Testamento donde fue victoriosa por adorar a Dios, proclamar el Evangelio, enseñar La Palabra, instituir comunión entre los hermanos, y por servirse unos a otros. Demos como Ref., al texto siguiente:
“Si yo hablara lenguas humanas y angélicas, pero no tengo amor, he llegado a ser como metal que resuena o címbalo que retiñe. 2 Y si tuviera el don de profecía, y entendiera todos los misterios y todo conocimiento, y si tuviera toda la fe como para trasladar montañas, pero no tengo amor, nada soy” 1Corintios 13: 1-2.
NOSOTROS CREEMOS EN LA OBRA DEL ESPÍRITU SANTO. El Espíritu Santo de Dios nos ha regenerado, nos ha dado fe, nos ha sellado, nos ha bautizado, nos ha hecho su morada permanente, y de continuo quiere guiarnos hacia una vida de plenitud en Cristo. Adicionalmente, nos ha dado dones espirituales para la edificación y el servicio de la iglesia.
¡Sirvamos, entonces, con amor, y contribuyamos así a que nuestra iglesia sea fiel cumplidora a su misión!
Amén.
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NOTAS A PIE DE PÁGINA
(1)La primera parte sirve como una introducción para establecer la crítica a la ideología del Dr. Schep a su obra.
(2)Apocalipsis 2 y 3.
(3)Estos principios de santidad que se refiere son conocidos como “algo extra”.
(4)En algunas solicitudes para el pastoreado se hace la pregunta si ha recibido el don de hablar en lenguas. Esto hace referencia en las dominaciones populares tales como la “Asamblea De Dios” y otras.
(5)Es como si el Espíritu de Dios tenga aún que dar más de lo que ya nos dio en Su palabra y Sacrificio.
(6)pa/n to. ple,rwma
(7)pa/n to. ple,mwra th/j qeo,thtoj
(8)Se ha cumplido todo aspecto del Sacrificio de Cristo y de igualmente las Escrituras. Todo descansa entre el Sacrificio y Su Palabra. Estas dos nos llevan al signo ecuación (=) Plenitud.
(9)Perfecto perifrástico pasivo de indicativo de plëroö, pero sólo un predicado, no dos.
(10)Está ideología no pone al hombre a responder a Dios quien le ofrece en Su libre gracia salvadora, y por medio de la regeneración y luego la fe en Cristo. Sino, que Dios, es quien responde.
(11)el adjetivo indefinido acusativo masculino singular.
(12)participio del verbo presente en voz media de kei/mai—keimai, empleando aquí como frecuentemente como el perfecto en voz pasiva de ti,qhmi—tithëmi (pongo) en lugar de teqeime,non—tetheimenon.
(13)Otros textos de referencias: Isaías 28:16; Hechos 4:12; Efesios 2:20; 1 Corintios. 3:10-12
(14)Desde principios de l994, miembros especiales de la B. de T. como John Arnott, Benny Hinn, Randy Clark, Rodney Howard Browne, Claudio Freidzon o François Botes, llevan la antorcha de la B. de T. alrededor del mundo a comunidades de orientación carismática. (En Alemania deben de haber sido captadas unas 400 comunidades).
(15)No hay ningún mandamiento en las Escrituras para que busquemos ser bautizados con el Espíritu Santo, simplemente se nos dice que ya lo estamos.
(16)¿Debería el Espíritu Santo venir a consolar a la iglesia judía, la cual había rechazado y crucificado a Jesús? Al contrario, ¡llegaría acusarla seriamente por boca de los apóstoles! En nuestros tiempos llega por el fundamento establecido por Jesucristo y sus apóstoles—La Palabra.
(17)Esto NO incluye a: Benny Hill, Yiye Avila, y otros locales. (18)Los Apóstoles son constituidos fundamentos también Ef. 2:20.
(19)Era para conservar y propagar mejor la verdad y, para el mayor consuelo y establecimiento de la Iglesia contra la corrupción de la carne, malicia de Satanás y del mundo, donde le plugo a Dios dejar esa revelación por escrito, (Luc.1:3,4; Rom.15:4; Isa.8:20, Rev.22:18) por todo lo cual las Santas Escrituras son muy necesarias (2ª Tim.3:15, 2ª Ped.1:19) y tanto mas cuanto que han cesado ya los modos anteriores por los cuales Dios revelo su voluntad a su Iglesia (Hebreos.1:1,2) LA CONFESIÓN DE FE DE WESTMINSTER Primer Capítulo. Por medio de esta providencia vemos la fidelidad que Dios ha mostrado en guardar su verdad. Esto implica que las Sagradas Escrituras aun no habían sido terminadas cuando Dios se placía en revelar su verdad en diversas maneras en el corazón del hombre.
(20)Autores que fueron Inspirados por Dios, y que Dios, en su providencia guardaba Su Palabra.
