¿cuáles son las virtudes y defectos del gobierno presbiteriano?
Pues, está haciendo la pregunta a un presbiteriano, y entonces, es muy difícil contestar con objetividad. A la misma vez, no creemos que nuestra forma de gobierno sea algo de opinión o deseo personal, sino creemos que es lo que Dios nos manda en las Santas Escrituras. Esto es al contrario, por ejemplo, de los anglicanos, que creen que su forma de gobierno es Bíblico, pero, que también consideran las formas congregacionales y presbiterianas de ser legítimos.
Por ejemplo, cuando había una discusión sobre la cuestión de las reglas que los cristianos judíos querría imponer sobre los gentiles, leemos en Hechos 15:1-2, “Entonces algunos que venían de Judea enseñaban a los hermanos: Si no os circuncidáis conforme al rito de Moisés, no podéis ser salvos. Como Pablo y Bernabé tuviesen una discusión y contienda no pequeña con ellos, se dispuso que subiesen Pablo y Bernabé a Jerusalén, y algunos otros de ellos, a los apóstoles y a los ancianos, para tratar esta cuestión.” En este concilio, consideraron las cuestiones que llevaron los dos lados al Concilio de Jerusalén. Por eso, también nosotros tenemos una Asamblea para considerar los asuntos doctrinas y de práctica. No tenemos Apóstoles, pero, se congregan los ancianos, tanto los pastores así también los ancianos gobernantes.
Así también, creemos que los pastores deben estar ordenados por el presbiterio, la asamblea regional de los ancianos, como leemos en 1 Timoteo 4:14 cuando San Pablo estaba hablando con Timoteo, “No descuides el don que hay en ti, que te fue dado mediante profecía con la imposición de las manos del presbiterio.”
También, creemos que los dos oficios en la iglesia son los de anciano (u, obispo) y diácono, y por eso, en 1 Timothy 3 y Tito 1, nos dan los requisitos de ser un anciano en la iglesia. Por eso, en Tito 1:5 leemos, “Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada ciudad, así como yo te mandé.” Este versículo nos indica que había ancianos y no solamente un anciano en cada iglesia, al contrario de la práctica de la iglesia de Roma. Pero, también nos indica qué debe de ser la práctica de la iglesia, es decir, establecer ancianos en cada iglesia.
Pero, para contestar en otra manera, supongo que sí haya unas ventajas y desventajas en seguir los mandamientos a Dios en cuanto al gobierno presbiteriano. Por ejemplo, a veces se tarda en hacer unas cosas, porque tiene que considerar los puntos de vista de los otros hermanos, y no puede hacer todo a la vez. Por ejemplo, en mi propia iglesia, yo querría comenzar un culto nocturno de los domingos, y los ancianos me prohibieron. También, a considerar el asunto de la membrecía de personas indocumentadas, había muchas discusiones entre los ancianos de la iglesia, que me frustraron mucho. Pero, la misma cosa es una ventaja, en que tenemos la ventaja de la sabiduría de muchos. También, la organización tiene la ventaja de objetividad en que es posible disciplinar a los hermanos que están desviando en doctrina y práctica. A la misma vez, nos ayuda en promover la obra del Señor, porque nuestros presbiterios fundan y apoyan el crecimiento de iglesias nuevas.
Y como siempre, hay mucho más que decir, y si quiere más, estoy a sus pies en Cristo Jesús, y espero que nuestro Dios de gracia le bendiga en todo.
Muy atte.
Su hermano en Cristo,
Esteban Larsón Macías, de www.iglesiareformada.com
Pastor de la Iglesia del Señor Viviente de la
Iglesia Presbiteriana Ortodoxa
Santa Ana, California, EE.UU.
