LA DEBILIDAD  

por Oscar Tenes

INTRODUCCION
En este estudio, analizaremos un tema interesante, que es: “La debilidad” hemos detectado, en nuestro caminar en Cristo Jesús, y además hemos visto y con suma tristeza,  como este tema es tergiversado por todos los profesantes de una religión, especialmente aquellas que “No” tienen como centro o base de sus reuniones el estudio de la palabra de Dios, contenida en la Biblia. 
Se cree absurdamente en muchos lugares, o se piensa sin analizar lo que dice la Biblia , que los débiles son los malos cristianos y que los fuertes son los buenos cristianos. Ahora bien, en este estudio analizaremos realmente si esto es lo que leemos  en la Biblia , o NO.
La Biblia menciona en 1 Corintios 4:1 lo siguiente: “Así pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo y administradores de los misterios de Dios”.
Este tema de la debilidad lo consideraremos como un misterio, o sea,  algo que está velado u oculto para la mente, pero una vez que la mente lo conoce,  deja de ser misterio, convirtiéndose entonces en una revelación, debido a su naturaleza de misterio este tema, deseamos que se convierta para usted en una revelación.  
LOS LLAMADOS DEBILES EN LA BIBLIA
Si  preguntamos en una congregación de Hijos de Dios: “Quienes son débiles”  La respuesta sin dudar sería que muchos no se considerarían de esta forma, esto por no conocer este misterio; pero veamos ¿A quienes la Biblia llama débiles? 
Leamos a 2 Corintios 13:4 dice: "Porque aunque fue crucificado en debilidad, vive por el poder de Dios. Pues también nosotros somos débiles en él, pero viviremos con él por el poder de Dios para con vosotros."
Al leer cuidadosamente este pasaje, comprendemos que Cristo fue crucificado en debilidad, esto implica que tuvo una etapa en que fue débil, asimismo la Biblia nos cataloga a nosotros como débiles, ahora bien, es importante entender ¿Por qué’?
En primer lugar debemos preguntarnos, ¿por qué Cristo fue crucificado en debilidad? El evangelio en la Biblia dice en Hebreos 7:18-19 “Queda, pues, abrogado el mandamiento anterior a causa de su debilidad e ineficacia (pues nada perfecciono la ley), y de la introducción de una mejor esperanza, por la cual nos acercamos a Dios” 
Está claro en estos versículos que la ley fue débil, porque nada perfeccionó. Derivado de esto, podemos comprender lo que dice la Biblia : Dice que  Cristo vino a cumplir la ley (Mateo 5:17), por consiguiente todo aquel que cumple la ley, obviamente permanece, esta sujeto a debilidad. Así que Cristo fue crucificado en debilidad por causa de que él estaba cumpliendo un pacto que nada perfeccionaba, era un pacto de maldición (Galatas 3:10) El pacto dado por Dios a  Moisés, fue también una añadidura (Galatas 3:19) Además de ser un pacto de maldición, fue un pacto de condenación y de muerte, pero temporal, no eterno (2 Corintios 3:7-11) Afortunadamente este pacto fue quitado (Romanos 10:4). Además de enfatizar este pasaje que Cristo murió en debilidad, asimismo nos cataloga a nosotros como débiles; pero en contraste, también  menciona  que viviremos por el poder de Dios, cabe entonces la pregunta: ¿Qué es el poder de Dios? O ¿Cuál es el poder de Dios?  En el cual viviremos.  Estudiémoslo:
EL PODER DE DIOS
Muchos  piensan que el poder de Dios es como un rayo, o son truenos, o relámpagos, o una experiencia mística que  eriza nuestros pelos, o algo que nos  pone a temblar, o nos hace caer al piso.  Amado lector eso no es el poder de Dios. Entonces, ¿cuál es poder de Dios? Leámoslo en la Biblia : Romanos 1:16 “Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego”
Entonces, y según este pasaje Bíblico “El evangelio”, es el poder de Dios.  Ahora, ¿por qué el evangelio es poder de Dios?  Porque usted es débil y cuando  está en un estado de debilidad, el evangelio reitera y nos dice, como se menciono en el Antiguo Testamento: "Diga el débil, fuerte soy" (Joel 3:10) asimismo en el evangelio, se revela la justicia de Dios (Romanos 1:17)
De tal forma, que podemos decir sencillamente, que: El poder de Dios, son las buenas nuevas que hay en el evangelio, con énfasis en las 14 epístolas  desde Romanos hasta Hebreos. 
Si buscamos el poder de Dios fuera del evangelio, caeremos en un rotundo engaño, veamos un ejemplo: En el antiguo pacto la Biblia dice en Josué 1:9 “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas” Analicemos que aquí, antes del sacrificio de Cristo en la cruz, era el esfuerzo del hombre, y no de Dios, sin embargo en el Nuevo Pacto, en el evangelio es todo lo contrario, leamos Filipenses 4:13 “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”  Vemos que es algo totalmente diferente, aquí ya no es el esfuerzo del hombre, sino que todo lo puedo, No en mi, sino en Cristo, que vive dentro de mi (Colosenses 1:27), por consiguiente nuestro poder, o más bien, el poder de Dios está en nosotros, por eso es que todo lo podemos.
LA MANIFESTACION DEL PODER DE DIOS
Algo que es trascendental, en la vida de todos los Hijos de Dios es, conocer como se perfecciona o se manifiesta el poder de Dios, en nuestras vidas, estudiémoslo en la Biblia leamos 2 Corintios 12:7-9 "Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera; respecto lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí. Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo."
Esta bastante claro en estos versículos que el poder de Dios se perfecciona   en nuestra  debilidad, porque como hemos acotado el "poder de Dios", es el evangelio, entonces la ecuación sería si Dios lo dice en el evangelio en la Biblia , entonces yo lo creo.  De tal forma que,  a pesar de las pruebas, a pesar de los problemas, usted puede decir como Pablo en Romanos 8:28 “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”  o sea que para nosotros todo esta bien, pues todo nos ayuda para bien, asimismo podemos mencionar Romanos 5:17 “Pues si por la trasgresión de uno solo reinó la muerte, mucho, más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia”  esto implica que a pesar de cualquier circunstancia que nos agobia, de una u otra forma estamos “Reinando en Vida”, ya que el fruto del espíritu no es tristeza sino gozo (Galatas 5:22)
Como complemento podemos citar a 2 Corintios 12:10  "Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte”
Pablo sigue afirmando que el se gozaba en las debilidades, porque cuando entendemos porque somos débiles, entonces somos fuertes,  igual debiese ser para nosotros, tomemos por ejemplo, cuando tenemos alguna escasez en nuestra economía, podemos llegar a hacer  malas confesiones, algunas veces esto nos deprime; pero si entendemos lo que hemos venido estudiando, y nuestra confesión es positiva ahí el poder de Dios se perfecciona cuando usted dice por ejemplo: “Yo lo lograré, yo me declaro en prosperidad”. Pues todo lo puedo en Cristo que me fortalece”  
Asimismo también en este versículo dice Pablo: "de buena gana me gloriaré". Pero no sólo en debilidades, hay unas cuantas aseveraciones más. Dice ahí: "en necesidades, en persecuciones"  por ejemplo cuando hablan mal de usted.  Cuando lo persiguen por ser un hijo de Dios.   Al entender que todo nuestro poder, proviene de Dios y no de nosotros, entonces, ahí se tiene que manifestar el poder de Dios, es decir en nuestra debilidad, en entender que es Dios en nosotros el que puede, y no nosotros por nosotros mismos, de tal forma que las persecuciones no nos causan malestar, al contrario estas debiesen ser motivo de gozo como afirma el Apóstol Pablo.
Asimismo sigue diciendo "…en angustias…"Analicemo s lo que significa  “angustia”  Angustia es por ejemplo: Una persona que está en dolor, que está en profunda necesidad, está angustiado. Ahora bien, ¿Como se manifiestan las angustias? El mismo Pablo nos menciona que estas se manifiestan  a través de los deseos engañosos (Romanos 8:7)  muchos pensamientos nos agobian, incluso  hasta nos pueden mandar a una cama en depresión. Eso es ser débil, pasar esas necesidades, eso es debilidad. ¿Y ahí es, cómo se perfecciona el poder de Dios? Diciendo o confesando lo contrario por ejemplo: Diciendo que estamos bien, que todo lo podemos en Cristo, que andamos en una buena conciencia, etc.
Basta solo con ver que  hay personas que sufren de cosas que le sucedieron en el pasado, por ejemplo de cosas cuando eran jóvenes, o cuando eran niños, de situaciones,  o de malas experiencias, y no las pueden borrar. Las tienen en las mentes constantemente y esto les afecta su personalidad, les afecta el trato con los demás. Esas personas sufren por falta de conocimiento de la Biblia , por consiguiente, el poder de Dios hay que perfeccionarlo. ¿En qué parte de nuestra vida? pues desde ahora mismo declárese débil y confié en el poder de Dios, nútrase del conocimiento del evangelio.
El poder de Dios, debe aplicarse a nuestra vida, por lo tanto,  a cada uno, nos toca aplicarlo y trabaja diferente en todos y en cada uno. Usted no puede formarse un patrón,  No, esto es individual, Pablo dijo: “Cada uno llevará su propia carga”. Y lo más maravilloso que hay para un ser humano es conocer el evangelio.  La mayoría de hijos de Dios no saben qué es el poder de Dios. Hay gente que se cree que el poder de Dios es que usted pase al frente, y  lo llenen de aceite, o de alguna otra cosa, como últimamente se esta usando, esto no es poder de Dios, como dijimos el Poder de Dios es el evangelio y sobretodo el conocimiento del mismo. 
Asimismo podemos acotar que el poder de Dios se perfecciona a través de la mente, no a través de un ejercicio corporal, que cualquiera puede hacer; Podemos establecer de acuerdo con 1 Corintios 2:12 “y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido”. Asimismo Pablo dice que ahora nosotros le servimos a Dios con la mente (Romanos 7:25).   El poder de Dios que usted y yo necesitamos para sobrevivir en este nuevo milenio es un conocimiento. Y es un conocimiento escrito en la Biblia.
NUESTRA DEPENDENCIA EN JESUCRISTO
Un versículo muy interesante que amplifica nuestra dependencia en Jesucristo lo leemos en 2 Corintios 3:5-6 "No que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismo, sino que nuestra competencia proviene de Dios, el cual asimismo nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, (no del viejo pacto) no de la letra, (no de la ley, no de Moisés, no de las obras) sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica” 
Lo primero que deberíamos estudiar es: ¿Qué es la letra? La Respuesta es sencilla.  La letra es la ley, dada por Dios a Moisés, que significa que cuando usted la lee o trata de someterse a ella, trae como consecuencia el hacer obras. ¿Y qué es el espíritu? Es el evangelio que es que cuando usted lo lee, lo confiesa y lo aplica a su vida, usted depende de Dios y no de usted mismo.  Lo importante que venimos recalcando es que como hijos de Dios, no podemos hacer las cosas por nosotros mismos, pues nuestra competencia proviene de Dios, ahora un ejemplo importante sería:  Si nosotros como Hijos de Dios le robamos a alguien, lo que estamos transmitiendo, es diciéndole a Dios “Tu no eres capaz de darme lo que yo necesito por eso yo tengo que hacer mi parte y robar”  amado hermano eso no es cierto pues todo lo puedo en Cristo que me fortalece, recuerde que Dios es el dueño de todo.
Otro pasaje Bíblico importante lo encontramos en 2 Corintios 4:17-18, leámoslo: "Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria, no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas."
Si analizamos detenidamente,  podemos concluir que en este mundo, todas las cosas se dañan, todo tiende a hacerse inservible,  por ejemplo: Si usted compra una lavadora esta tarde o temprano, se daña, lo mismo sucede si se compra una refrigeradora, esta algún día se dañará,  así como si se compra un radio y se daña. Etc.
Aquí todo se daña. Por el contrario nosotros quisiéramos depender,  de cosas que se compran y que fueran eternas.   Quisiéramos tener una casa que no se dañe, pero las casas se dañan.   Aquí todo se daña ¿Sabe por qué? Porque esta creación está sujeta en debilidad.  La ley es débil, la creación es débil, Usted es débil, y aquí todo es débil. ¿Pero y por qué todo es débil? Porque Dios no se va a dar el lujo de darle a nadie seguridad en cosas materiales, él quiere que usted dependa de él.  Amado hermano es indudable que hay que depender total y absolutamente  de Dios.
LA HUMILDAD DEL CREYENTE
La Biblia dice en Hebreos 12:28 “Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia”
Dice: "Puesto que ya hemos recibido un reino inconmovible sirvamos a Dios con gratitud, y reverencia". O sea, que no podemos únicamente llenarnos de conocimiento, y no vivir,  o poner en práctica eso que hemos aprendido, y por eso entre en nosotros la jactancia. Por consiguiente tenemos que vestirnos de humildad, porque estamos viviendo en un mundo muy frágil y con una tremenda falta de conocimiento del evangelio, aun de los líderes cristianos. Recordemos que nuestra competencia proviene de Dios. Tenemos que aprender a vivir humildemente, viviendo por lo que leemos en la palabra de Dios y por lo que prediquemos o hablemos.  De tal forma que nuestro vocabulario tenga tanto peso de gloria, o sea, un excelente peso de gloria.
EL PODER DE LA CONFESIÓN
Hay algunos versos en Isaías,  que es un gran  profeta, utilizado por Dios y mencionado por Pablo en sus epístolas,  Isaías hablaba proféticamente de algo que acontecería posteriormente en el Nuevo pacto.  Leamos Isaías 33:24 “No dirá el morador: Estoy enfermo; al pueblo que more en ella le será perdonada la iniquidad”
Él hablaba proféticamente, pensando que las enfermedades iban a desaparecer, pero es natural que ahora,  las enfermedades existen, la idea es tratarlas como lo que son, “una leve tribulación momentánea”. Esto es leve. Sin embargo cualquiera se enferma, todos nos enfermamos; bien sea por los alimentos, o por la situación que se vive este mundo, por epidemias,  etc, todos nos enfermamos. La idea es cómo llegar a un estado de confesión, y que podamos decir: Yo no digo nunca que estoy enfermo, aunque lo este. Yo digo que estoy sano.
Ahora, ¿por qué? Por lo que dice Isaías 53:4 explica lo que acabamos de confirmar en Isaías 33:24. "Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido."
Aquí leemos que él llevó.  No dice que nosotros también las tenemos que llevar, dice que Cristo ya se las llevó, o sea que el se llevo todas las enfermedades.
Si él las llevó, que bueno fue y además fue un buen trueque. De tal forma que nosotros ahora podríamos decir: Si, él las llevó, yo no las voy a llevar. Yo digo que no estoy enfermo, yo me declaro sano, esa es una saludable confesión.
Es innegable que a veces hay que ir al médico, pero es indispensable nuestra confesión, recuerde que somos hijos del Gran Rey.
CONCLUSION:
Vamos a terminar con el profeta menor Joel, Leamos Joel 3:10 "Forjad espadas de vuestros azadones, lanzas de vuestras hoces; diga el débil: fuerte soy”  
Dice claramente diga el débil fuerte soy, Pero ¿cómo usted puede decir que es fuerte si es débil? Eso es paradójico, si es débil no puede decir que es fuerte. Usted, lógicamente, en un pensamiento normal dice: “Pues si yo soy débil, yo soy débil”. Pero aquí  dice: "Diga", o sea, no es que seamos débiles, es que lo confesemos, que confesemos que somos  fuertes. Pero sin embargo, somos débiles, lo que estamos tratando aquí es con nuestra boca, con nuestra  confesión. Por lo tanto, esto es un llamado a no dejarnos llevar por la posición actual de este cuerpo. Porque si nos dejamos llevar por eso, entonces vamos a reinar en debilidad, no a reinar en vida.
Vamos a terminar con Romanos 7:18-20 "Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago. Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí  Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí. Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios" 
¿Por qué Pablo tuvo que decir? En mí no mora el bien, esto es mi carne.  Esto es derivado de que  el espíritu está  completo (Colosenses 2:10), está perfecto (Hebreos 10:14) no así la carne.
Es importante entender, la condición de mi carne y la de mi espíritu, porque ya él hizo el sacrificio único en la cruz, y por eso mismo nuestro espíritu esta en esa condición de perfecto o completo,  pero nuestro  cuerpo en sí es débil, por causa de su estado de corrupción y por eso Pablo le llama: "el pecado que mora en mí".
Pablo se deleitaba en la ley de Dios, que no es la ley dada por Dios a Moisés, aquella que esta escrita en nuestros corazones y no en tablas de piedra (Hebreos 8:10)  Esta no es la ley de Moisés, esta es la ley del Espíritu, es la ley de Dios (Romanos 8:2).
Sigamos leyendo a  Romanos 7:23-25  “pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros. ¡Miserable de mí!¿quién me librará de este cuerpo de muerte¡ Y aquí viene la exclamación: "Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carnea la ley del pecado"
Por consiguiente la carne es débil y no podemos vivir por  la carne, o pensar de acuerdo a la carne porque esto es muerte (Romanos 8:6).
Un ejemplo tremendo de esta expresión “Diga el débil, fuerte soy” es el caso de  Gedeón para la guerra.  Gedeon tenía  treinta mil hombres, pero Dios le dice a Gedeón que eso era mucha gente, para tal propósito. Y por ultimo Dios escogió a  trescientos.  Se quedó de treinta mil con trescientos. Ahora si analizamos que en esos trescientos había una actitud, y esa era humildad y la confesión, o sea que utilizaban  la boca. Ellos eran, la gente que iba a beber agua, pero que no tenían que soltar las armas y lamer como el perro el agua, usar la boca. Entonces todos los que lamían, esos calificaban, pero los que soltaban el arma y cogían con la mano, esos no iban. Y si vamos a hablar nosotros, figurativamente, en el mundo entero de creyentes, nosotros somos como trescientos. Pero Dios no necesita gente fuerte en carne, gente competente por ellos mismos. Lo que Dios necesita es un ejército que sepa hablar. ¿Sabe por qué? Porque si aprendemos a hablar, y hablar el conocimiento de Dios, contenido en la Biblia , esto es el verdadero poder de Dios. Recordemos que un solo ángel cruzó a dos millones de personas por el Mar Rojo, uno, uno.  De tal forma que la debilidad, que significa dejar que Dios haga, porque yo no puedo, es un don en nosotros los hijos de Dios.  ABBA PADRE.
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