LOS HIJOS DE DIOS
por PASTOR: OSCAR ENRIQUE TENES PELLECER
Una pregunta muy importante, que nos tenemos que hacer todos nosotros los hijos de Dios es: ¿que somos nosotros sus hijos para Dios? Veámoslo en este corto estudio.
Primeramente leemos en el Salmo 82:6 en la Biblia algo interesante, leamos: “Yo dije: vosotros sois dioses, Y todos vosotros hijos del Altísimo” esta misma expresión fue repetida por Jesús cuando vivió en la tierra dijo en Juan 10:34 “Jesús les respondió: ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois?”
La Biblia tipifica a todos los hijos de Dios como dioses con “d” minúscula, esto porque somos hijos de Dios escogidos por él (Efesios 1:4). Ahora bien, Esto no lo podemos tergiversar como algunos han pretendido; Creen, que ellos mismos pueden tomar el papel de Dios, lo cual los ha llevado y los llevará a un fracaso rotundo en sus ministerios. En la Biblia Dios establece, y nos cataloga como sus hijos o dioses, es porque, tenemos nuestra identidad espíritu la cual es propiedad de Dios porque él así lo dispuso leemos en 1 Corintios 6:20 lo siguiente: “Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios” Esto implica que somos de Dios, simple y sencillamente porque él lo decidió así; De tal forma que: Esto no es asunto nuestro. Lo que denota que el merito es de Dios, no de nosotros.
Otro aspecto importante, que dice la Biblia, es que cataloga a los hijos de Dios como Ángeles, lo menciona el libro a los Hebreos 12:22-23 que dice: “sino que os habéis acercado al monte de Sión, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la celestial, a la compañía de muchos millares de ángeles, a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos, a los espíritus de los justos hechos perfectos”
Cada uno de nosotros, por ser hijos de Dios, se nos considera como ángeles, pero además somos espíritus justos hechos perfectos Hebreos 12:23; Esto es porque, nosotros tenemos la identidad del hombre espiritual.
Otro aspecto que se hace necesario que veamos es lo que Pablo en 1 Corintios 15:40 acota: “Y hay cuerpos celestiales y cuerpos terrenales; pero una es la gloria de los celestiales y otra la de los terrenales” versículo 49 “Y así como hemos traído la imagen del terrenal, traeremos también la imagen del celestial” Vemos en estos pasajes de la Biblia que tenemos la imagen terrenal y tendremos la del celestial, De tal forma que nosotros también seremos transformados, dice Filipenses 3:21 “el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas”
Amado hermano, usted y yo como hijos de Dios, no somos cualquier cosa, al contrario somos algo precioso para Dios, ¡GLORIA A DIOS!
PASTOR: OSCAR ENRIQUE TENES PELLECER
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